Invasión de Bahía de Cochinos, también conocida como Invasión de Playa Girón o la Batalla de Girón, fue una operación militar en la que tropas de cubanos autoexiliados, entrenados, financiados y dirigidos por la CIA de los Estados Unidos de Norteamerica, intentaron invadir Cuba en abril de 1961, con el propósito de tomar una cabeza de playa, formar un gobierno provisional y buscar el apoyo de la OEA y el reconocimiento de la comunidad internacional. La acción acabó en fracaso en menos de 72 horas, fue completamente aplastada por las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) de Cuba. Más de un centenar de invasores murieron, y los cubanos capturaron a otros 1.200, junto con importante material bélico.
Preparativos
El 17 de marzo de 1960, Eisenhower ordenó a la CIA la organización de una unidad paramilitar compuesta por exiliados cubanos, con el propósito de derrocar a Fidel Castro. En esta empresa, la CIA tenía la responsabilidad de coordinar acciones de inteligencia con grupos anti-castristas dentro de Cuba, que pudieran facilitar la invasión. Pues se confiaba en levantamientos populares contra Fidel y en deserciones masivas en sus fuerzas.
En noviembre de 1959 comenzaron a reunirse grupos que habían sido opositores a la dictadura de Batista, y que no estaban de acuerdo con el rumbo que estaba tomando la revolución, como la Legión de Acción Revolucionaria (LAR) o la Acción Católica Universitaria (ACU). Estos movimientos estaban formados, en su mayoría, por jóvenes universitarios católicos de clases acomodadas, quienes decidieron buscar a otros excombatientes del Movimiento 26 de Julio en desacuerdo con la implementación de un régimen comunista, recibiendo además el apoyo de la CIA y parte del clero cubano.
En estas reuniones se creó el Movimiento de Recuperación Revolucionaria (MRR). Entre sus fundadores estaba Manuel Artime Buesa, quien llegó a ser teniente de las fuerzas de Castro, lideraba un grupo de jóvenes de la ACU, que habían sido fundadores del LAR, y se estaban trasladando a los Estados Unidos para ser entrenados militarmente por la CIA. A partir de Enero de 1960 empezaron a trasladarse a Estados Unidos en forma individual el grupo formado por los estudiantes universitarios y el 17 de mayo de 1960, un grupo de 10, fueron trasladados al Motel María Antonieta de Fort Laudardale. En la madrugada del 19 de mayo, Manuel Artime y Roberto de Varonas se presentaron en el Motel y fueron presentados a los miembros de la CIA (Carl J. y Gordon) quienes fueron los encargados de trasladarlos a Useppa Island, en el estado de Florida. En ese grupo inicial estaba Carlos Rodríguez Santana. En días posteriores fueron llegando los otros miembros que conformarían el grupo fundador de la Brigada 2506. A este grupo de estudiantes se sumó un grupo de jóvenes oficiales del Ejército de Cuba, que había servido durante el gobierno de Batista, luchando contra la guerrilla de Fidel Castro. El grupo fue dividido en dos, un grupo recibiría entrenamiento como radio-operadores (los universitarios) y el otro quedaría como instructores militares de los futuros combatientes. El plan original consistía en una lucha de guerra de guerrillas.
El 4 de julio de 1960, el grupo de los radio-operadores fue trasladado al aeropuerto de Opalocka en Miami y transportado a Guatemala. Anteriormente, el grupo conformado por ex militares y un puñado de universitarios, había sido trasladado a Panamá. El grupo de Guatemala aterrizó en el aeropuerto de San José, en la costa del océano Pacífico, y fue trasladado en un autobús perteneciente al Ejército de Guatemala a la finca Helvetia, propiedad de Roberto Alejo, hermano del Ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala, bajo el Gobierno del Presidente Miguel Ydígoras Fuentes.
Los miembros de este grupo de radio-operadores estudiaban telegrafía en la semana, los sábados y domingos construían la Base TRAX, en las montañas adyacentes a la finca Helvetia. Posteriormente llegó el Coronel Napoleón Valeriano (a) Coronel Vallejo, el cual tenía gran experiencia en la lucha guerrillera en Filipinas, su tierra natal derrotando a la guerrilla comunista (Hukbalahap). En un origen, la lucha sería de guerrillas; posteriormente, una decisión política la transformó en una brigada de combate.
La Brigada contaba con la élite de las fuerzas aéreas de Cuba, compuesta por ex-pilotos de la Marina de Guerra, Fuerza Aérea y Ejército. En la parte civil de la Fuerza Aérea de Liberación "FAL", los pilotos de los aviones de transporte provenían de las líneas aéreas comerciales como Cubana de Aviación, Aerovías Q; algunos de ellos tenían un promedio de 20000 horas de vuelo. Ellos volarían obsoletos aviones bimotores C-46 y cuatrimotores C-54 dados de baja tras la Segunda Guerra Mundial.
El armamento militar que el gobierno estadounidense suministró a la Brigada se componía de pistolas Colt M1911A1, fusiles Garand, carabinas M1 y M2, subfusiles M3, subfusiles Thompson, fusiles automáticos Browning BAR, ametralladoras M1919, ametralladoras M2 y granadas Mk 2. El armamento pesado consistía en morteros de 60 mm, 81 mm y 4,2 pulgadas, así como cañones sin retroceso de 57 mm y 75 mm. También fueron equipados con explosivo C-3 y C-4 para las demoliciones. Sus equipos de radio eran los PR-6 y PR-10.
• 8 aviones de transporte C-46.
• 6 aviones de transporte C-54.
• 16 bombarderos B-26.
• 5 tanques M41 además de jeeps, cañones, morteros y camiones.
• 8 barcos y 7 lanchas para desembarco.
El plan inicial fue modificado por decisión del presidente Kennedy, preocupado por la imposibilidad de negar la participación norteamericana en un asalto de tan gran escala. En el aire ordenó que fueran la mitad, pasando de esta forma de 16 a 8 los aviones participantes. En tierra, tras renunciar al desembarco cerca de Casilda y Trinidad, el nuevo plan trasladó el punto de ataque a Playa Girón, en la Bahía de Cochinos, costa sur de Cuba. Las fuerzas invasoras partirían por mar desde Puerto Cabezas, Nicaragua. Los ataques aéreos partirían desde Puerto Cabezas y la idea era que anularan la fuerza aérea cubana bombardeando los aviones y las pistas de los aeropuertos. Durante el desembarco continuarían los vuelos de abastecimiento y protección de las fuerzas atacantes. La infantería y la artillería intentarían controlar en principio la Península de Zapata, cerca de Bahía de Cochinos (desde Playa Larga a Playa Girón), donde se asentaría una cabeza de playa, que después de un periodo de tres días solicitaría el traslado hacia allí, desde Miami, de un Gobierno Provisional conformado por los miembros del Consejo Revolucionario, organización que había sustituido al Frente Revolucionario Democrático, el cual lo componían los cinco movimientos originales: MRR, OA, AAA, MDC y DRE. Al frente del Consejo Revolucionario estaba el Dr. José Miró Cardona y se reclamaría formalmente la ayuda militar de EE. UU. La zona elegida para el desembarco era una zona pantanosa de difícil acceso y con una sola entrada por tierra que los paracaidistas tratarían de controlar ante la respuesta del ejército cubano.
En el plan inicial, la zona de la invasión era Trinidad. Teniendo el Escambray como alternativa de lucha y escape si fallaba la invasión; además estaban las guerrillas que luchaban en el Escambray. Había otro desembarco programado en el oriente del país en la zona de Imías, pero al final no se realizó por orden del presidente Kennedy.
Desde Puerto Cabezas (actual Bilwi), Nicaragua, partieron los buques que transportaban al contingente integrado por unos 1,500 hombres con la aprobación muy a su pesar de John F. Kennedy como continuación de la política del gobierno anterior.
Consecuencias
El número de bajas entre los anticastristas sobrepasó el centenar de muertos; los capturados fueron 1189. Los prisioneros anticastristas fueron juzgados y condenados por el gobierno cubano, siendo canjeados a través de intermediarios con el gobierno estadounidense a cambio de 53 millones de dólares en forma de alimentos, medicinas y tractores. A finales de 1962 llegaron a EEUU, donde fueron recibidos y homenajeados por el presidente Kennedy.
La victoria se convirtió en un enorme respaldo a Fidel Castro y al carácter socialista de la Revolución Cubana, proclamado tiempo antes. Después de llegar la Brigada a Estados Unidos y ser invitados a ingresar en el Ejército Estadounidense, Robert Kennedy, Procurador de Justicia, decidió volver a preparar una nueva invasión, y para tal efecto le pidió a Manuel Artime que organizara de nuevo otros campamentos; a tal efecto Artime consiguió que Somoza aceptara dar su apoyo y éste volvió a prestar su territorio para organizar los nuevos campamentos. El mismo se nutriría de los miembros de la Brigada que se habían enrolado en el Ejército Estadounidense, excombatientes que estaban viviendo en Miami y otros cubanos. Desde Nicaragua se hicieron varios ataques a instalaciones en Cuba, pero la operación terminó cuando se atacó por error al barco español Sierra Aránzazu al confundirlo con el barco Sierra Maestra. En ese ataque murió el capitán del barco español; la CIA tuvo que pagar un millón de dólares como indemnización y puso fin a las actividades en Nicaragua.
Posteriormente, parte de las barcazas dadas a Manuel Artime fueron cortadas a la mitad y transportadas al Congo. Y la CIA contrató a alguno de estos cubanos que estaban en Nicaragua para que participaran en las luchas en el Congo, e igualmente contrataron a los pilotos que habían participado en la Invasión de Bahía de Cochinos, los cuales volaron nuevamente en los B-26 y ayudaron a que los comunistas no se hicieran con el poder.
El devenir histórico del conflicto entre ambas naciones, el apoyo del llamado campo socialista y de las masas populares al gobierno revolucionario y la conocida como Crisis de los misiles de Cuba o Crisis de Octubre fueron frustrando las acciones de la administración de Kennedy con respecto a una invasión a Cuba. El pacto Kennedy-Kruschev fue un arreglo entre Estados Unidos y Rusia para no permitir ningún nuevo ataque contra Cuba por parte de los exiliados cubanos.
Preparativos
El 17 de marzo de 1960, Eisenhower ordenó a la CIA la organización de una unidad paramilitar compuesta por exiliados cubanos, con el propósito de derrocar a Fidel Castro. En esta empresa, la CIA tenía la responsabilidad de coordinar acciones de inteligencia con grupos anti-castristas dentro de Cuba, que pudieran facilitar la invasión. Pues se confiaba en levantamientos populares contra Fidel y en deserciones masivas en sus fuerzas.
En noviembre de 1959 comenzaron a reunirse grupos que habían sido opositores a la dictadura de Batista, y que no estaban de acuerdo con el rumbo que estaba tomando la revolución, como la Legión de Acción Revolucionaria (LAR) o la Acción Católica Universitaria (ACU). Estos movimientos estaban formados, en su mayoría, por jóvenes universitarios católicos de clases acomodadas, quienes decidieron buscar a otros excombatientes del Movimiento 26 de Julio en desacuerdo con la implementación de un régimen comunista, recibiendo además el apoyo de la CIA y parte del clero cubano.
En estas reuniones se creó el Movimiento de Recuperación Revolucionaria (MRR). Entre sus fundadores estaba Manuel Artime Buesa, quien llegó a ser teniente de las fuerzas de Castro, lideraba un grupo de jóvenes de la ACU, que habían sido fundadores del LAR, y se estaban trasladando a los Estados Unidos para ser entrenados militarmente por la CIA. A partir de Enero de 1960 empezaron a trasladarse a Estados Unidos en forma individual el grupo formado por los estudiantes universitarios y el 17 de mayo de 1960, un grupo de 10, fueron trasladados al Motel María Antonieta de Fort Laudardale. En la madrugada del 19 de mayo, Manuel Artime y Roberto de Varonas se presentaron en el Motel y fueron presentados a los miembros de la CIA (Carl J. y Gordon) quienes fueron los encargados de trasladarlos a Useppa Island, en el estado de Florida. En ese grupo inicial estaba Carlos Rodríguez Santana. En días posteriores fueron llegando los otros miembros que conformarían el grupo fundador de la Brigada 2506. A este grupo de estudiantes se sumó un grupo de jóvenes oficiales del Ejército de Cuba, que había servido durante el gobierno de Batista, luchando contra la guerrilla de Fidel Castro. El grupo fue dividido en dos, un grupo recibiría entrenamiento como radio-operadores (los universitarios) y el otro quedaría como instructores militares de los futuros combatientes. El plan original consistía en una lucha de guerra de guerrillas.
El 4 de julio de 1960, el grupo de los radio-operadores fue trasladado al aeropuerto de Opalocka en Miami y transportado a Guatemala. Anteriormente, el grupo conformado por ex militares y un puñado de universitarios, había sido trasladado a Panamá. El grupo de Guatemala aterrizó en el aeropuerto de San José, en la costa del océano Pacífico, y fue trasladado en un autobús perteneciente al Ejército de Guatemala a la finca Helvetia, propiedad de Roberto Alejo, hermano del Ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala, bajo el Gobierno del Presidente Miguel Ydígoras Fuentes.
Los miembros de este grupo de radio-operadores estudiaban telegrafía en la semana, los sábados y domingos construían la Base TRAX, en las montañas adyacentes a la finca Helvetia. Posteriormente llegó el Coronel Napoleón Valeriano (a) Coronel Vallejo, el cual tenía gran experiencia en la lucha guerrillera en Filipinas, su tierra natal derrotando a la guerrilla comunista (Hukbalahap). En un origen, la lucha sería de guerrillas; posteriormente, una decisión política la transformó en una brigada de combate.
La Brigada contaba con la élite de las fuerzas aéreas de Cuba, compuesta por ex-pilotos de la Marina de Guerra, Fuerza Aérea y Ejército. En la parte civil de la Fuerza Aérea de Liberación "FAL", los pilotos de los aviones de transporte provenían de las líneas aéreas comerciales como Cubana de Aviación, Aerovías Q; algunos de ellos tenían un promedio de 20000 horas de vuelo. Ellos volarían obsoletos aviones bimotores C-46 y cuatrimotores C-54 dados de baja tras la Segunda Guerra Mundial.
El armamento militar que el gobierno estadounidense suministró a la Brigada se componía de pistolas Colt M1911A1, fusiles Garand, carabinas M1 y M2, subfusiles M3, subfusiles Thompson, fusiles automáticos Browning BAR, ametralladoras M1919, ametralladoras M2 y granadas Mk 2. El armamento pesado consistía en morteros de 60 mm, 81 mm y 4,2 pulgadas, así como cañones sin retroceso de 57 mm y 75 mm. También fueron equipados con explosivo C-3 y C-4 para las demoliciones. Sus equipos de radio eran los PR-6 y PR-10.
• 8 aviones de transporte C-46.
• 6 aviones de transporte C-54.
• 16 bombarderos B-26.
• 5 tanques M41 además de jeeps, cañones, morteros y camiones.
• 8 barcos y 7 lanchas para desembarco.
El plan inicial fue modificado por decisión del presidente Kennedy, preocupado por la imposibilidad de negar la participación norteamericana en un asalto de tan gran escala. En el aire ordenó que fueran la mitad, pasando de esta forma de 16 a 8 los aviones participantes. En tierra, tras renunciar al desembarco cerca de Casilda y Trinidad, el nuevo plan trasladó el punto de ataque a Playa Girón, en la Bahía de Cochinos, costa sur de Cuba. Las fuerzas invasoras partirían por mar desde Puerto Cabezas, Nicaragua. Los ataques aéreos partirían desde Puerto Cabezas y la idea era que anularan la fuerza aérea cubana bombardeando los aviones y las pistas de los aeropuertos. Durante el desembarco continuarían los vuelos de abastecimiento y protección de las fuerzas atacantes. La infantería y la artillería intentarían controlar en principio la Península de Zapata, cerca de Bahía de Cochinos (desde Playa Larga a Playa Girón), donde se asentaría una cabeza de playa, que después de un periodo de tres días solicitaría el traslado hacia allí, desde Miami, de un Gobierno Provisional conformado por los miembros del Consejo Revolucionario, organización que había sustituido al Frente Revolucionario Democrático, el cual lo componían los cinco movimientos originales: MRR, OA, AAA, MDC y DRE. Al frente del Consejo Revolucionario estaba el Dr. José Miró Cardona y se reclamaría formalmente la ayuda militar de EE. UU. La zona elegida para el desembarco era una zona pantanosa de difícil acceso y con una sola entrada por tierra que los paracaidistas tratarían de controlar ante la respuesta del ejército cubano.
En el plan inicial, la zona de la invasión era Trinidad. Teniendo el Escambray como alternativa de lucha y escape si fallaba la invasión; además estaban las guerrillas que luchaban en el Escambray. Había otro desembarco programado en el oriente del país en la zona de Imías, pero al final no se realizó por orden del presidente Kennedy.
Desde Puerto Cabezas (actual Bilwi), Nicaragua, partieron los buques que transportaban al contingente integrado por unos 1,500 hombres con la aprobación muy a su pesar de John F. Kennedy como continuación de la política del gobierno anterior.
Consecuencias
El número de bajas entre los anticastristas sobrepasó el centenar de muertos; los capturados fueron 1189. Los prisioneros anticastristas fueron juzgados y condenados por el gobierno cubano, siendo canjeados a través de intermediarios con el gobierno estadounidense a cambio de 53 millones de dólares en forma de alimentos, medicinas y tractores. A finales de 1962 llegaron a EEUU, donde fueron recibidos y homenajeados por el presidente Kennedy.
La victoria se convirtió en un enorme respaldo a Fidel Castro y al carácter socialista de la Revolución Cubana, proclamado tiempo antes. Después de llegar la Brigada a Estados Unidos y ser invitados a ingresar en el Ejército Estadounidense, Robert Kennedy, Procurador de Justicia, decidió volver a preparar una nueva invasión, y para tal efecto le pidió a Manuel Artime que organizara de nuevo otros campamentos; a tal efecto Artime consiguió que Somoza aceptara dar su apoyo y éste volvió a prestar su territorio para organizar los nuevos campamentos. El mismo se nutriría de los miembros de la Brigada que se habían enrolado en el Ejército Estadounidense, excombatientes que estaban viviendo en Miami y otros cubanos. Desde Nicaragua se hicieron varios ataques a instalaciones en Cuba, pero la operación terminó cuando se atacó por error al barco español Sierra Aránzazu al confundirlo con el barco Sierra Maestra. En ese ataque murió el capitán del barco español; la CIA tuvo que pagar un millón de dólares como indemnización y puso fin a las actividades en Nicaragua.
Posteriormente, parte de las barcazas dadas a Manuel Artime fueron cortadas a la mitad y transportadas al Congo. Y la CIA contrató a alguno de estos cubanos que estaban en Nicaragua para que participaran en las luchas en el Congo, e igualmente contrataron a los pilotos que habían participado en la Invasión de Bahía de Cochinos, los cuales volaron nuevamente en los B-26 y ayudaron a que los comunistas no se hicieran con el poder.
El devenir histórico del conflicto entre ambas naciones, el apoyo del llamado campo socialista y de las masas populares al gobierno revolucionario y la conocida como Crisis de los misiles de Cuba o Crisis de Octubre fueron frustrando las acciones de la administración de Kennedy con respecto a una invasión a Cuba. El pacto Kennedy-Kruschev fue un arreglo entre Estados Unidos y Rusia para no permitir ningún nuevo ataque contra Cuba por parte de los exiliados cubanos.
1961 Fracaso de la invasion de EEUU a Cuba